viernes, 19 de octubre de 2012

Polla perversa



Los largos dedos del Dr.Tiziano cierran con firmeza los párpados de Alan, condenando ésos ojos verdes a la fría oscuridad eterna. Gelen quita la sábana blanca que cubre su cuerpo y desconecta uno a uno los aparatos a los que está conectado el terso pecho rasurado de Alan... con voz grave pregunta : - ¿Hora de la muerte, doctor? - -16.22 horas - responde el Dr.Tiziano, con un lacónico - Gracias - la enfermera sale de la habitación dejándolo a solas con el cadáver.  Gelen ha visto otras veces ésa mirada de perversa lascivia en los ojos del Dr.Tiziano. Sabe que en esos casos tiene que demorar un tiempo la noticia del fallecimiento del paciente.

La mirada de lujuria del Dr.Tiziano recorre el joven cuerpo desnudo de Alan, de pelo castaño lacio y largo hasta más allá de la nuca, de piel blanca y suave. En sus carnosos labios parece que aún hay un atisbo de querer sonreír... Alan aún guarda una cálida belleza, a pesar que en pocas horas el rigor mortis habrá invadido su cuerpo.

En la aséptica habitación blanca del hospital, el doctor con la mirada fija cargada de vicio hacia el cuerpo de Alan, va desnudándose lentamente como si se tratase de un ritual ceremonial... Al sacarse el slips negro, lo arroja contra la cara de Alan, rebotando hacia el suelo, dejando su pene liberado y cimbreante, tremendamente erecto y excitado. Con ansia se abalanza sobre ése cuerpo sin vida para rendir culto a su adicción a los juegos prohibidos... Mete su lengua con altanería dentro de la boca de Alan, para beber de sus labios violaceos, el dulce licor de la muerte que emana de sus entrañas... besa su cuello con deseo y sus ardientes labios descienden viciosamente hacia sus amelocotonados pezones, mordiendo con arrogancia ésa piel aún caliente, pero escalofriante... La excitación le quema las entrañas cuando su boca llega al largo y grueso pene que saborea con inmensa glotonería, sabiendo que ha sido deseado y chupado por cientos de hombres anónimos durante años... Ahora él lo engulle en su húmeda boca con verdadera ansia, a la par que mete bruscamente sus largos dedos en el culo de Alan...

El Dr.Tiziano observa con placer la insultante belleza de ése cuerpo que ha perdido el calor de la vida, como una ramera librado a él por la mismísima muerte, para someterla a sus caprichos más perversos que su mente pueda parir... Con la prepotencia de quien se cree el dueño de la vida y la muerte se pone de rodillas ante la cara de Alan, y después de abofeterla al grito de: -Puta...puta...-  Le agarra con vehemencia la melena y escupe en su cara para luego mearse en ella, esparciéndose el caliente líquido amarillo por los labios...

Excitado por un irrefrenable deseo, las manos del Dr.Tiziano agarran con fuerza el cuerpo de Alan, que empieza a tener cierta rigidez, con violencia le da la vuelta encima de la camilla poniéndolo boca abajo... En plena vorágine de sudor y efervescencia sexual, introduce con petulancia su enrojecido capullo exageradamente lubricado en el culo de Alan. Su caliente y dura polla enviste con ferocidad durante largo rato ése culo prominente, notando en su pene castigador el frío que ya invade sus entrañas. La sensación de estar poseyendo un cadáver va acercando al Dr.Tiziano al clímax, hasta que aferrado a su lacia cabellera la garganta del Dr.Tiziano emite un aullido de goce casi sobrehumano, seguido de espasmos de placer...

Gelen sube el volumen de su transistor, a la par que cerrando los ojos, desliza sus pequeños dedos de uñas pintadas de rojo pasión dentro de sus diminutas braguitas de blonda blanca para acariciarse su mojada vagina... En éstos momentos suspira por estar muerta en ésa habitación.

Jaume Serra i Viaplana

Fotografía: Andrés Mauri 
www.queerdarkphoto.blogspot.com
Modelo: Jaume Serra Viaplana. 
jacobbarcelona@gmail.com

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